Como hemos dicho se trata de un autoconsumo solar conectado a la red eléctrica. Durante el día los paneles otorgan energía necesaria para el consumo habitual de la vivienda. Durante la noche la casa se abastece del suministro público pero ya con un precio de la electricidad más barato. También podemos rebajar el término de potencia contratada.
Todo esto nos permite conseguir una reducción importante de 9.484 € anuales lo que supone un ahorro diurno de un 46,18 % en la factura de electricidad. En 30 años puede llegar a ahorrar unos 356.545 €.
Con estos datos el periodo de recuperación de la inversión de 7,1 años.
Por un lado ahorramos durante el día gracias a los paneles y por otro ahorramos por la noche gracias al uso de la tarifa nocturna